El primer programa de Peligro Sin Codificar supo capitalizar en la gran noticia del 2013. Sólo unos días antes, Jorge Mario Bergoglio, ex Cardenal de Buenos Aires, era electo Papa. El Papa Francisco. El primer Papa latinoamericano. El primer Papa argentino. El primer Papa jesuita. Ni lerdos ni perezosos, los humoristas armaron un grupo de cumbia y tiraron "La cumbia Papal": un éxito en las redes sociales. Esa misma tarde todo el mundo compartía el video y era lo que más había gustado del regreso de Sin Codificar, aunque estuvo hasta Cacho Castaña cantando sus propias canciones en versión reggae.
Este domingo pascual debía traer algo más, ya que el segundo programa sólo había dejado un videoclip de la misma canción que arenga, con un canto de chancha en contra de los brasileros, al flamante pontífice. Emulando el comienzo de uno de los temas de Nene Malo, Los Cuatro Puntos Cardenales, cantaron "Cómo me gusta la Misa". ¿Por qué pegan tanto los Puntos Cardenales? Creo que porque tomaron un tema serio y muy polémico con ingenio y respeto, sin meterse en detalles que pueden ser hirientes para creyentes o elemento de burla para quienes critican la religión católica.
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